Quien lee es una persona más culta que quién no lo hace y en el caso de la persona sorda implica el acceso a la cultura y a la comunidad mayoritaria, la oyente.
Leer es un hábito, un aprendizaje que se incorpora a nuestro comportamiento y es nuestro deber como docentes alentarla y ser mediadores de su aprendizaje.
Leer es un hábito, un aprendizaje que se incorpora a nuestro comportamiento y es nuestro deber como docentes alentarla y ser mediadores de su aprendizaje.
Si bien la reflexión está referida a los sordos y de hecho es así ya que la lectura es su medio de comunicación a distintos niveles, resulta muy válida para los que estamos del otro lado del silencio.
ResponderEliminarTu Blog aspira a ser una antorcha más en el camino abrupto de todos los sordos y lo más importante que revela un esfuerzo personal. Adelante!! y Felicitaciones!!!